sábado, 6 de febrero de 2016

¿Y si no nos vemos?

Me llamas fantástica, mágica, genial, maravillosa, guerrera…
Te llamo talentoso, misterioso, asombroso, desconcertante…
Nos deshacemos en elogios el uno al otro porque no nos hemos visto
Porque lo dos tenemos una imaginación poderosa y sabemos apreciar y valorar el talento ajeno.
Lo único que conocemos con certeza son los dibujos, las palabras y el tono de nuestras voces cuando hablamos. Y nos gusta. Ha sido emocionante hablar contigo por teléfono los últimos tres días.
¿Y si nos vemos y todo se derrumba?
Hay tres desenlaces ante la posibilidad del encuentro:
  1. Que los dos quedemos conmovidos ante tanta belleza y seducción y desfallezcamos ante el deseo, es decir, que el cerebro nos tienda una trampa.
  2. Que uno de los dos se entusiasme y el otro no.
  3.  Que los dos veamos con dolor cómo su ídolo se deshace ante la presencia viva del ser sensacional que había creado en su mente y descubramos que sólo somos dos seres humanos porque no tenemos alas como las hadas que tanto nos gustan y tampoco podemos hablar con la luna como los lobos; tenemos talento y eso no es poca cosa, pero no tenemos alas. Somos dos simples seres humanos caminando por las calles de una ciudad destruida.
Podemos escoger entre André Guide y Petrus Borel. Podemos hacer una fusión entre esas dos ideas poderosas sin vernos, sin destruir la imagen que cada uno ha construido del otro gracias a la constatación de lo que sabemos hacer muy bien.  Yo escribo y tú dibujas lo que percibes y sientes cuando lees lo que escribo. ¡Maravilloso!
Tú dibujas mejor de lo que yo puedo llegar a escribir. Escribir es más fácil que crear seres con ojos que miran, movimientos sutiles del cuerpo, boca y sentimientos en un hoja de papel con un lápiz de $200. Ya habrás notado que tanta admiración suelo confundirla con  Amor porque sentirse enamorado es una experiencia superior y me encanta sentirme enamorada de alguien como tú.
Voy a compartir contigo, para ti, estas frases sacadas de otro ensayo sobre el amor que escribí hace más de diez años. Espero que te gusten tanto como a mí:
Sólo el amor del Amor podría escapar al aburrimiento. Se trata del deseo de amar, siempre fugaz, que se desvanece cuando se hace realidad. Porque el otro, cuando por fin cree haber encontrado al ser amado, nunca estará a la altura del amor ideal.
El amor  no debería ser un «carnal cruce de sexo» sino perpetuación del deseo, de gozo en el sufrimiento, en la sensación de que el objeto amoroso está próximo y lejano, es caprichoso y majestuoso, humano pero con un halo de divinidad; se trata, en últimas, de un sentimiento que alberga contemplación y deseo y por encima de todo idealización del amor, concebido como la experiencia que le concede mayor vitalidad al ser humano:
El amor es uno de los preceptos fijos de los hombres discretos … es el comportamiento más hermoso de los hombres corteses y nobles… Un hombre cortés no puede estar libre de pasión ni desnudo de languidez, porque la pasión tal como la han descrito los sabios y como lo dicen los filósofos, es la primera puerta a través de la cual se abren las mentes y se ensancha el espíritu, y tiene una intensidad en el corazón por la que vive el alma.
Cuando usted apareció quedé deslumbrado… la sangre se me oxigenó, los músculos se me fortalecieron, el pensamiento se me aclaró, y me creció el valor. El amor me dice las mentiras más absurdas.
Por ti conozco quién soy. Me levantaste de tierra y me elevaste hasta el cielo; y diste un dulce sonido a mi lenguaje.

No hay comentarios:

Publicar un comentario